Los extremos se tocan y que nada valga implica, paradójicamente, que vale todo, y al revés. Si nada vale, ¿por qué no ha de valer tanto el caviar como la hamburguesa? Tanto monta este cantante como este otro, este libro como aquel, esta música como aquella. Los criterios no existen porque todo se pone en duda, incluso la ciencia. Y si se han difuminados los baremos, ¿por qué va a tener menos valor lo que no supera los mínimos, cuando se ponen en duda de esos mínimos y a quien los impone?
Y esto se produce porque vivimos en un exceso de oferta y demanda, en una opulenta realidad saturada de mensajes, de moral diversa y multiforme donde toda ética es igual a la contraria y a la amplia gama de morales y éticas, vendibles o no, que puedan surgir, ocurrencias que se inventan a diario en busca de provocar nuevo hambre en quien ya está saciado. Porque vivimos en un caleidoscopio aparentemente infinito de opciones, de mercaderías interminables y por ello los productos malos no se distinguen de los buenos. No distinguimos el bien del mal, porque estamos hartos.
Muere García Márquez y asidos a la fórmula de la divinización de ídolos, se nos vende al escritor y el público asiente sin capacidad crítica, con la indolencia algo entusiasmada con que se recibe el obligado parabién. ¡Cuántas contraportadas proclaman a diario en cada escritor el definitivo cambio de rumbo de la literatura, tan sólo para hacer caja! Y el público, que conoce el teatrillo, se desencanta pero finge sorprenderse una vez más. El mercado, en su afán de «crear necesidades» cada minuto, ha provocado la saturación y una apatía crónica. Si surge algo excelente, se mira con desdén. A fuerza de proclamar ilusión, han destruido la ilusión. Se fuerza la risa, se fuerza el deseo y no hay deseo. Y todo es plástico encajable. Las novelas novedosas son aburridas pero el lector insiste en caer en el el espejismo del mes. Y es así como alimentamos, con estrépito, una sociedad vacía.
Publicado en prensa de papel (La Voz del Tajo- Talavera de la Reina) el 6 de mayo de 2014)
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