Desde el punto de vista comercial, buscando a Dory es un gran acierto, porque intenta repetir el éxi
to de la primera película y llenar las arcas de Disney abundando en la ocurrencia ictiológica. Pero como dic
e Arconada, la película no encuentra el tono. Analicemos aquí ambas.
BUSCANDO A NEMO.
Esta primera película basa su éxito en la ocurrencia de dos pececitos de colores perdidos en el océano, en busca de otro más pequeño e incapacitado.
Para ordenar la cuestión, tres son los motivos por los que considero que la película tiene calidad
TOCA TRES TEMAS UNIVERSALES
La película toca tres temas cercanos a nosotros:
– El desamparo del hombre.
– La compasión.
– La familia.
PRIMER TEMA, EL DÉBIL CONTRA EL FUERTE.
La sensación del espectador al salir de la sala es de haber asistido a un viaje por un universo gigantesco dónde tres pequeños David vencen al Goliat de un entorno hostil y poderoso. HÉROES Y AYUDANTES en contra de un OPONENTE ANTAGONISTA, alegoría de la propia vida. Esta esencia sentimental constituye el disfrute final. Hay un eje de fondo temático muy sólido aquí. Todos nos hemos sentido alguna vez pececitos de colores en medio de una selva que nos puede devorar.
SEGUNDO TEMA, LA FAMILIA
Por supuesto, también tema universal. Disney lo explota porque en la mayoría de los cuentos, sean escritos o filmados, la familia es el punto de referencia del niño. En Nemo, un padre viudo busca a su hijo y viaja para ello al otro extremo del mundo. La película de 2003 se focaliza mucho en esta idea, tocando el corazón de los infantes.
TERCER TEMA, LA COMPASIÓN
También tema universal. A los dos anteriores se suma nuestro sentido de caridad, la empatía con el otro, el instinto de ayudar a personas que por sufrir una discapacidad reconocemos como buenas. Por ser pequeños y débiles en su lucha contra el fuerte, las concedemos un mejor derecho, pues su minusvalía les hace más virtuosos.
ESTAS TRES IDEAS UNIVERSALES calan a cualquier espectador. Hay temáticas que nos afectan personalmente y otras que nos pillan lejos y Buscando a Nemo acierta en elegir estas tan cercanas.
Todo ello hace de Nemo una película más «profunda» (son dibujos, tampoco es arte y ensayo, digo «profundidad» en el sentido moderado que el género requiere) Y estos universales dan a la obra unidad y madurez.
BUSCANDO A DORY
EL PROBLEMA DEL PROTAGONISMO IMPROPIO
El principal problema de Buscando a Dory es que traiciona su ARQUETIPO de criada AYUDANTE.
EN BUSCANDO A NEMO Dory se encuadra en un cliché clásico de secundario, sirviente, criado gracioso del hidalgo serio, su CONTRAPUNTO. Sería el equivalente a un Sancho para un Quijote, un clown rojo frente al blanco, etc. En la primera película, como ayudante funcionaba y era reconocible. Merlin era más serio, llevaba la carga dramática y ella hacía los chistes. Por ello Nemo está más ordenada y la cosa estaba repartida. Cada cual tenía su función.
Esta segunda película convierte al criado en protagonista y a Merlin en ayudante y los papeles se invierten.
CARGA DRAMÁTICA ROTA
La carga dramática se aminora porque Dory no puede pervertir su icono ya clásico de graciosa y esa es la causa de que el guionista no se pueda emplear a fondo en dar cuerpo al personaje, puesto que es un personaje fluctuante atrapado entre sus obligaciones de graciosa y su nueva misión de personaje dramático.
AYUDANTE IMPROPIO SIN FUNCIÓN
Al tiempo, a Merlin se le relega a ayudante. Pero se le resta toda intervención, porque los guionistas no saben qué hacer con él, tampoco con Nemo. Simplemente acompañan.
LA DUALIDAD NO EXISTE
Al carecer Merlin de funciones reales, la dualidad PROTAGONISTA/AYUDANTE se rompe, restándole a esta secuela la base en que se sustentaba la primera.
SIN TEMÁTICAS UNIVERSALES
Esta tarea de compartir función dramática a la vez que graciosa en el personaje de Dory, pensando que podía soportarlo todo, provoca una distorsión de efectos. La nueva película no subraya, como la otra, lucha del débil contra el fuerte, (labor de Merlin en Nemo) ni siquiera las minusvalías, (labor de Nemo en Nemo) ocupándose Dory de los chistes. Y la familia tampoco se desarrolla con suficiencia. Veamos cómo.
PRIMER TEMA, EL DÉBIL CONTRA EL FUERTE.
No encontramos en Dory abandonada en un entorno hostil, ese mar abierto real donde la vida podía ser cruel, cruda y mortal. Aquí meten a los bichos en un parque temático donde protegen a los animales enfermos. La idea débil contra entorno peligroso desaparece. La ansiedad realista que le daba «verosimilitud» no está. No hay entorno depredador. Buscando a Dory cambia el mar abierto por el parque temático «mar abierto» (como una especie de guiño). Los pececitos ya no son alegorías del humano en la vida sino niños que se divierten en un juguete controlado donde te dan unas pulseras para montarte en las atracciones. Incluso podríamos ver la «etiqueta» que lleva Dory como una alusión. Cambia el ENTORNO. Ya no hay desolación y desamparo. El destinatario es ese niño explorador y aburguesado que está deseando pillar la piscina en vacaciones. Pierde profundidad la película.
SEGUNDO TEMA, LA FAMILIA
El encanto de Buscando a Nemo era que veíamos al padre durante toda la película como protagonista, desarrollado, sufriendo en acción, en directo, viviendo la aventura de la búsqueda o el amor ausente. Era una prosodia qué veíamos al minuto
El amor de la hija Dory por sus padres no es tan intenso. Debe ser graciosa y la pérdida de memoria interrumpe el sentimiento de perdida. Sus lagunas mentales, no dan lugar a que disfrutemos de esa sensación de amor perdido.
Acaso, conscientes de ellos, elaboran una backstory con Dory bebé donde se nos muestra un encanto de pececito que da pena. Es una solución hábil, abandonar a la loca de las cabras y centrarse en la Dory bebé, que tiene otro carácter, para alimentar el sentido familiar de la obra, de amor entre padres e hijos. Pero aunque es una buena solución no es completa.
Tal vez todo ello da como resultado demasiadas cosas, demasiado deslavazadas, al contrario que en Nemo, que había dos ideas simples predominantes.
Hay un momento tierno, el reencuentro de Dory con los padres y el sacrificio que estos han realizado durante años, manteniendo la esperanza, simbolizada en las conchas, que nos toca el corazón. Pero es insuficiente porque tampoco los personajes de los padres se desarrollan con suficiencia
TERCER TEMA, LA COMPASIÓN
Desaparece también este universal. La minusvalía de Dory antes sirve para las gracietas que para que sintamos lástima. Acaso lo sentimos cuando Dory es bebé y en parte cuando sufre la pobre pececita azul renegando de su problema como origen de su desgracia, pero una vez más percibimos que es el criado gracioso quien habla y que le es impropio sufrir de ese modo.
HABLAN MUCHO
Toda esta búsqueda de los guionistas por hallar tono a la película hace que los personajes hablen y hablen continuamente buscando mostrar uno y otro aspectos y que todos queden bien cumplidos, conscientes que de algo les falla y no detectando qué es. El problema es doble, la ruptura de arquetipos y la sobrecarga de funciones en Dory frente al vacío funcional de Merlin y Nemo. Además, surge otro ayudante más, el pulpo, con lo cual la cosa se complica, lejos ya de la simplicidad tonal necesaria en una película de dibujos y en el diseño de arquetipos.
OTROS ASPECTOS
¿Entonces la peli es mala? ¡Qué va, la peli se disfruta mucho! Pero es inferior a Nemo, eso sí.
Porque en realidad, Dory juega con otro enfoque. El problema es que busca ajustarse a los recursos de la primera y no lo logra. Pero cuando se resignan y busca otros recursos acierta.
EL PARQUE TEMÁTICO.
La opción de que se halle en un parque temático, se aprovecha. La película pasa a ser simplemente un juguete sin profundidad que nos llegue, un entretenimiento más, de los muchos que hay en el mercado, que no atraviesa la pantalla, pero que se disfruta, viendo cómo los peces pasan de una atracción a otra en una fiesta de aventuras bien diseñadas, superficialmente hablando.
ARQUETIPOS Y DIVERSIÓN EN BUSCANDO A DORY.
Dory se beneficia de jugar con personajes conocidos que la gente quiere por lo que de entrada ya hay una predisposición positiva para disfrutar de ella. En la medida en que fueron construidos con solidez, mantienen su prestancia.
Los nuevos personajes aciertan porque están diseñados con una característica extravagante que los hace visibles. También las aventuras son diversas (los peces saltando de chorro en chorro, el pulpo conduciendo el camión…) Todos son curiosos y anecdóticos. Todos tienen algo que les hace especiales. El pulpo transparente y mimético, como uno de los platos fuertes, los leones marinos perezosos y esquizofrénicos, el pájaro loco del cubo… Disney tiene la precaución de que todos estén muy definidos para poderlos explotar no sólo en esta película, probablemente, sino en sus parques temáticos de París u Orlando o en cualquier series de su canal de TV, por ejemplo
En definitiva, Disney es Disney y siempre hace las cosas bien, aunque se equivoque, porque tiene detrás un gran equipo. Y tienen un sentido comercial muy certero, aunque la cague en una narrativa más seria. Gusta y siempre usa cosas que funcionan y las sabe aplicar.
Un seis.
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