EL PP EN BANCARROTA.

Vamos a ver, porque esto no tiene nombre. Y mira que últimamente pretendo alejarme de la política, que es un caramelo envenenao, que te deja en pelotas cuando opinas. Por eso no escucho la radio, ni veo las noticias. Porque me cabrea mucho. Pero es que esto no tiene nombre. Te enteras, aunque no enciendas la tele.
A ver, Casado, majete. Lo peor que puede hacer un partido de derechas en este país, es llevarse mal entre ellos. Tú dices que no te llevas mal, pero nadie se lo cree. Y hay que hacer un gran esfuerzo para creerte. Porque la imagen que das es la opuesta. Y eso es lo que importa. En política es lo que importa: la imagen, no la realidad.

LA REALIDAD Y EL PP EN BANCARROTA

Pero vamos a la realidad, ya que te empeñas.
Resulta que el partido socialista (sí, los socialistas, no me voy por las ramas) aprovechan cualquier debilidad de la derecha para daros caña. Y como ellos tienen prestigio y vosotros no, con una buena chuleta que os propine, una sola, gana las elecciones. Y vosotros necesitáis un jab, un directo combinado, un croché, un gancho de derecha y todos los ganchos del boxeo del mundo y una clase avanzada de Mike Tyson, y aún así no lo derribáis. Porque por mucho que les golpeéis, no caen. No caen. Los socialistas no caen. Por mucha corrupción que lleven encima, no caen. Porque tienen prestigio. Porque sus militantes se lo perdonan todo, y la derecha no perdona nada, ni un tanto así, a sus dirigentes.

Quizás sea esto lo que no reconozcas. Quizás sea esa la base de tu error. El error en que caéis una y otra vez, en que lleváis cayendo ya muchos años. Y por eso lleva tanto tiempo el PP en bancarrota.

AYUSO Y EL PP EN BANCARROTA

Y ahora vamos a Ayuso. A Ayuso le digo lo mismo. ¿No has visto lo que pasó con Cristina Cifuentes, que por un robo de nada en un supermercado se tuvo que ir? ¿Cuántas veces has visto, Isabel Ayuso, caer a miembros de tu partido por cuestiones menores, cuando los socialistas, cometiendo el doble, el triple de tropelías, que parecen un dominguillo, que no caen? Pues Ayuso, hija mía, en plena pandemia, con cientos de muertos, ¿se te ocurre conceder a tu hermano, -tu hermanísimo-, unas prebendas, momios, canonjías, gajes, brevas o como se diga, de miles de euros? ¿Cómo permites que se forre, estando tú en el centro de las miradas?
¿Que no se ha forrado dices?, ¿que ha cobrado lo justo? ¿Que es legal? Pues no debería serlo porque, es tu hermano, T-U H-E-R-M-A-N-O, y en eso se fija la gente. “El hermano de la Ayuso contratado por la Comunidad de Madrid”. Es con lo que se quedan.
¡Venga ya, que no te dabas cuenta, a otro perro con ese hueso! No será corrupción, pero suena ello, y la gente no se para en barras. Porque la mujer del César no solo tiene que ser honrada, sino parecerlo. PAR-E-CER-LO.

LO QUE NO HA APRENDIDO EL PP

Lo que no aprendido el PP en los años que lleva de historia, es que se le mira con lupa cuando se habla de corrupción, mientras que a los socialistas se los mira de lejos. Con una pequeña tara, con un pequeño fallo, ya tienes a toda la horda pidiendo cabezas en el PP, mientras que, si un caso de mayor corrupción sacude al PSOE, lo olvidan, lo justifican, lo excusan, lo tratan como un caso menor y desvían el argumento. Y vuelven a centrarse en el PP, que es “el partido más corrupto de la historia”. “Más corrupto que ellos”, aunque no lo sea.
Y el mensaje ha calado. Ha calado y esto es lo importante. Porque el PP tiene un pasado dictatorial y los socialistas de lucha por la libertad, que la imagen mola mucho.
El PP tiene una imagen de carlistones, jaimistas, trabucaires, beatos acelerados, meapilas que tira de espaldas, y los socialistas lo contrario, defensores de las libertades heteropatriarcales, animalistas, ecologistas, LGTBIJKFM, aberztale, vizcaitarras y la caraba en bote.

LA INGENUIDAD DEL PP

Y ahora viene la ingenuidad del PP.
Se piensa Casado que prohibir en los estatutos la corrupción y atajar los casos que se produzcan es suficiente. Pues no, hijo mío, no.

No hay que atajarlos, hay que evitarlos.

LOS ESTATUTOS DEL PP

Lo que tienen que poner en los estatutos es que “se prohíbe TERMINANTEMENTE a cualquier familiar de cuarto o de quinto grado de un cargo público sea contratado como empresa para la comunidad, el Ayuntamiento, o lo que sea. ¿Que es injusto? También es injusto que se valore la corrupción del PP de una manera y de los socialistas de otra. Es injusto que, cuando el PP comete una tropelía, se le ponga en la picota, y cuando son los socialistas no. Pero es lo que hay.
Lo que importa es la imagen. Y si no quieres que te persigan por casos de corrupción, evítalos desde el principio.

Haz constar desde el principio en los estatutos que “ningún familiar, de quinto, o de sexto grado, ¡o de grado veinticuatro!, podrá ser contratado como empresa para un organismo público. DE NINGÚN TIPO».
¿Es algo que no recoge ningún estatuto de partidos políticos? El tuyo lo necesita, guapo. Lo necesita si quiere recuperar un prestigio que cada vez tiene más chungo. Porque, hoy por hoy, se encuentra el PP en bancarrota.

LAS CONSECUENCIAS ADVERTIDAS, (el PP en bancarrota)

Así, cuando las Ayuso (o el Presidente de la Comunidad de turno) gane unas elecciones, les dirá a sus hermanos, primos, tíos, cuñados, parientes lejanos, vecinos que conocieron en vacaciones…: “teneís terminantemente prohibido hacer negocios conmigo o con lo que dirijo. Ni siquiera como segunda o tercera empresa asociada. Porque me juego no ser seleccionada como candidata a la Comunidad si lo hago. O seré expulsada del partido sin contemplaciones si me pillan en un renuncio. Porque viene en los estatutos y lo sé de antemano”. ¡Y no harán falta detectives, que es muy patético, coño, que eso sí suena a mangoneo!
De este modo, a ningún candidato más, (y menos a la Comunidad de Madrid, que ya lleva lo suyo), se le ocurrirá contratar a un hermano o a quien sea de la familia en plena pandemia. Y menos por cuatro duros. ¡Porque si encima no se ha forrao… manda huevos!
Poner los medios desde el principio, para no tener que andar con detectives y otros asuntos sombríos, que solo dan mala imagen. ¡Qué es muy triste, coño, es muy triste!

LA DERECHA MODERADA

Que vendáis un partido de derecha moderada, bien. Pero no de derecha tonta. Una derecha que no previene, que no se entera de en qué partido de Quidditch están metidos. Que, aquello de los detectives, solo perjudica a la Ayuso, a la Comunidad de Madrid, a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, al PP y a ti, Casado, a ti, cariño, sobre todo a ti. Que malas son las refriegas con Cayetana Álvarez de Toledo y las Ayuso de turno. Pero te recuerdo que ahí está Vox, el perro al que alimentas con tus estupideces.